Método Feldenkrais Barcelona

Las series de movimientos están estructuradas de una forma precisa. Su realización requiere pensar, percibir, sentir,  moverse e imaginar un movimiento, pero sobre todo tener la curiosidad de investigar.

Los movimientos se realizan lenta y suavemente, una y otra vez, dentro de los propios límites, allí donde el movimiento resulta agradable,  evitando el dolor o la tensión.

Muchas lecciones están basadas en el desarrollo motor de la evolución, y otras en actividades funcionales cotidianas, como ser:   estirarse para alcanzar un objeto, ponerse de pie o permanecer de pie, acostarse y levantarse, mirar detrás de uno, etcétera. Otras lecciones están dirigidas a explorar las articulaciones, los músculos y las relaciones entre diferentes posturas.

El movimiento debe poder realizarse con comodidad, sin sobre esforzarse, y las instrucciones deben seguirse cambiando el foco de la atención con una escucha acerca de lo que va cambiando. No es útil realizar los ejercicios si estamos distraídos o si no nos damos cuenta de sus efectos.

El trabajo es netamente vivencial, práctico.

Los alumnos son guiados a través de consignas verbales a investigar el “cómo” realizar movimientos no habituales, posibilidades nuevas e inexploradas. Se van encontrando así opciones de mayor plasticidad, comodidad, y menor esfuerzo.

El énfasis está puesto en el aprendizaje. Qué movimientos funcionan mejor?

• Percibir la cualidad de esos cambios en el cuerpo hace que el movimiento se transforme en una experiencia de crecimiento y no en una repetición mecánica.
• Un movimiento orgánico comienza a ser más espontáneo. 
• Las molestias y tensiones habituales encuentran nuevas formas de organizarse, disminuyendo así las tensiones y rigideces crónicas. 
• El cuerpo va recuperando su lugar y su posibilidad de aprender día a día de sí mismo.